El presidente de Estados Unidos Barack Obama llamó a un nuevo comienzo en las relaciones entre Estados Unidos y los musulmanes en todo el mundo.
En un discurso pronunciado hace pocos momentos en la Universidad de El Cairo, Obama dijo que las relaciones deben estar basadas en respeto mutuo y que el ciclo de sospechas y discordia entre los estadounidenses y el mundo musulmán debe terminar.
Obama agregó que el cambio no se producirá de la noche a la mañana y que ningún discurso podrá erradicar años de desconfianza.
Durante su discurso, Obama destacó sus propios antecedentes con musulmanes en su herencia familiar y las contribuciones de los musulmanes en Estados Unidos.
Obama se comprometió a luchar contra los estereotipos negativos del Islam pero dijo que los musulmanes tampoco deben estereotipar a Estados Unidos como un imperio que solo busca sus propios intereses.
Además, el presidente Obama dijo que Estados Unidos y el mundo musulmán deben trabajar juntos para enfrentar el extremismo en todas sus formas.
Obama dejó claro que Estados Unidos no está y que nunca estará en guerra con el Islam.
Sin embargo, el mandatario norteamericano dijo que Estados Unidos confrontará a los extremistas violentos que representen un riesgo a la seguridad del país.
Obama agregó que la situación en Afganistán demuestra los objetivos de Estados Unidos y que las fuerzas estadounidenses, con el apoyo internacional, han perseguido a militantes del Talibán y Al Qaeda después de los ataques del 11 de septiembre de 2001.
El presidente Obama dijo que otra gran fuente de tensión es la situación entre israelíes, palestinos y el mundo árabe.
Obama indicó que los fuertes lazos de Estados Unidos con Israel son bien conocidos e irrompibles.
Agregó que el pueblo judío ha sido perseguido durante siglos y que amenazar a Israel con la destrucción en inaceptable.
Obama acotó que es innegable que el pueblo palestino ha sufrido en busca de una patria y que ha soportado el dolor del desplazamiento y las humillaciones que conlleva la ocupación.
El presidente norteamericano expresó que está en el interés de Israel, los palestinos, Estados Unidos, y el mundo, que los israelíes y los palestinos vivan en dos estados, en paz.