China recibió con beneplácito la nueva sociedad entre Rusia y la OTAN, indicando que no solo ayudará a mantener la paz en Europa, sino que también contribuirá a la paz y la estabilidad mundial.
Sin embargo, una declaración del Ministerio de Relaciones Exteriores emitido en Beijing este jueves, también advierte que con el fin de la Guerra Fría, es tiempo de crear un amplio marco de seguridad suficiente que se acomode al resto del mundo.
Rusia y la OTAN se transformaron en socios formalmente el martes, con el establecimiento del Consejo OTAN-Rusia. El Consejo da a Moscú una limitada participación en el proceso de decisión de la alianza en temas tales como la lucha contra el terrorismo y prevenir la proliferación de armas de destrucción masiva.