El ex-vice-presidente de Estados Unidos Al Gore acusó al presidente Bush de servir lo que ha calificado de “intereses poderosos”, en vez de atender al pueblo estadounidense. Y exhortó a los demócratas a utilizar ese argumento en contra de los republicanos, durante la campaña a las elecciones legislativas de noviembre.
Sus comentarios fueron publicados ayer en la sección de Opiniones y Editorial del diario The New York Times. Citando la serie de recientes escándalos corporativos, Gore dijo que “una fuerza poco común se combinó con una avaricia poco común para crear inmensas decepciones y pérdidas”.
Gore perdió por estrecho margen las controvertidas elecciones del 2000, y no ha descartado la posibilidad de lanzar su candidatura presidencial, nuevamente, para el año 2004.
Entre tanto, el presidente Bush dijo que la economía del país continúa fundamentalmente sólida, y prometió imponer castigos más severos contra ejecutivos corruptos.