Un fiscal y uno de los abogados acusadores pidieron ayer la pena máxima para los cuatro anticastristas cubanos vinculados por el presidente cubano Fidel Castro con un supuesto plan para matarlo en Panamá y que son enjuiciados en ese país por posesión ilegal de explosivos.
Este miércoles se presentarán los argumentos de otros dos acusadores y de la defensa, que incluye al ex fiscal general del país, Rogelio Cruz.
Los sindicados son los anticastristas Luis Posada, Gaspar Jiménez, Pedro Remón y Guillermo Novo, así como el cubano César Matamoros y el panameño José Hurtado, chofer de este último.
Se les acusa de posesión ilícita de explosivos, asociación ilícita para delinquir y atentar contra la seguridad colectiva, cargos derivados de un presunto complot denunciado por el propio Castro durante la X Cumbre Iberoamericana realizada en Panamá en noviembre del 2000.