Italia se unió a una tendencia europea en la prohibición de fumar, una gestión destinada a salvaguardar la salud de quienes no fuman, y nó de castigar a quienes lo hacen.
En momentos que la prohibición entraba en vigencia hoy, el ministro de salud italiano Girólamo Sirchia calificó la acción de fumar como un problema de salud que puede evitarse y que pone en peligro tanto a fumadores como a no fumadores.
Agregó que además, el problema causa altos costos al sistema de salud.