El papa Juan Pablo II no brindó su tradicional saludo del lunes pascual a los peregrinos en la Plaza San Pedro, una tradición informal que señala el fin de la observación de la Semana Santa en el Vaticano.
Miles de peregrinos colmaron la inmensa plaza frente a la Basílica de San Pedro, este lunes, con el deseo de ver al Pontífice.
Cámaras de la televisión vaticana ofrecieron tomas de la ventana del apartamento del Papa, al medio día, hora local, pero las cortinas permanecieron cerradas.
El lunes pascual es feriado en la mayor parte de Europa y otros países predominantenmente crisitianos que siguen el calendario gregoriano.
El líder de la Iglesia Católica, de 84 años de edad, estuvo durante casi 15 minutos en la ventana de su apartamento el domingo, al concluir la misa de Pascua, en la basílica.
El Papa bendijo a los presentes con la señal de la cruz, pero no pudo hablar, debido al tubo que le pusieron durante una traqueotomía, el mes pasado.