El primer ministro británico Tony Blair se reúne este jueves con funcionarios de inteligencia y de seguridad para analizar qué nuevos poderes se necesitan para impedir nuevos ataques terroristas en Londres.
Entre los temas que probablemente se analicen está si se permitirá en corte evidencia de intervención telefónica.
Gran Bretaña ya ha anunciado planes para el establecimiento de una base de datos de extremistas quienes serían automáticamente interrogados y se les prohibiría el ingreso al país.