Conservacionistas sostienen que los gorilas, en grave peligro de extinción, enfrentan una nueva amenaza, debido a que los rebeldes se están apoderando de su hábitat en la República Democrática del Congo.
La organización Wildlife Direct informó, el lunes, que las fuerzas del comandante rebelde Laurent Nkunda saquearon dos puestos de patrullaje de gorilas, en el Parque Nacional Virunga.
El grupo conservacionista sostiene que los soldados se apoderaron de las armas y los teléfonos móviles de los guardabosques.
Un guardabosques fue asesinado y otro resultó herido en un ataque separado en el parque, la semana pasada. Wildlife Direct indicó que debido a las circunstancias, ya no es posible para la organización trabajar en el área.
Grupos conservacionistas atribuyen a la caza y a la guerra, la baja en la población de gorilas.
Ellos culpan a los rebeldes leales a Nkunda de las muertes de dos de los animales, ocurridas en enero, en Virunga.
Se conoce de la existencia de unos 700 gorilas. Un censo, a comienzos de esta década, encontró 380 de los gorilas en Virunga, mientras estudios este año encontraron 340 en el vecino país de Uganda.