En el occidental estado de California, los bomberos tratan de contener más de 1.400 incendios que han estado ardiendo por más de una semana.
Funcionarios estatales de emergencia dicen que los incendios están centrados en la región Norte del estado, donde 140.000 hectáreas ya han sido calcinadas.
Más de 50 propiedades han sido destruidas, mientras otras 7.000 están amenazadas.
Hasta ahora no se ha informado de muertes, pero funcionarios de salud han expresado preocupación por la mala calidad del aire.
Unas 18.000 personas trabajan para contener los incendios, con la ayuda de por lo menos 100 helicópteros que arrojan agua.
El sábado, el presidente George W. Bush declaró estado de emergencia para California y ofreció ayuda federal para asistir en los esfuerzos de lucha contra los incendios.