Los cristianos ortodoxos en Rusia se reúnen en iglesias en todo el país para recordar el nonagésimo aniversario de la ejecución del zar Nicolás II y su familia a manos de soldados bolcheviques.
Las iglesias realizan servicios este miércoles y jueves en honor de la familia Romanov, el zar Nicolas, su esposa Alexandra y sus cinco hijos.
Soldados los mataron a balazos, el 17 de julio de 1918, en un sótano en la ciudad de Yekaterinburgo, en los montes Urales.
En el año 2000, la Iglesia Ortodoxa rusa canonizó a los siete Romanovs asesinados.
Anteriormente, este miércoles, investigadores rusos confirmaron que
los restos encontrados el año pasado cerca de Yaketerinburgo pertenecen a dos
de los hijos del zar, el príncipe heredero Alexei y la gran duquesa María.
Se encontraron balas y un conjunto de cápsulas junto a los restos óseos. Científicos dijeron que las cápsulas contenían ácido sulfúrico probablemente usado para desfigurar los cadáveres.