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Buscan soluciones al desecho de plásticos


Los residuos plásticos son un problema real en muchos países pobres.
Los residuos plásticos son un problema real en muchos países pobres.

Iniciativas en Uganda y Colombia buscan reciclar más plásticos con el fin de evitar que terminen en la basura.

Personas de todo el mundo utilizan envases de plástico desechable para tomar agua, guardar alimentos y otros contenidos debido a su practicidad y ligereza.

Pero si no se desecha correctamente, estos plásticos terminan siendo basura, contaminando los sistemas de agua y dañando el medio ambiente.

Los residuos plásticos son un problema real en muchos países pobres. Pero un país africano y un sudamericano están convirtiendo la amenaza en una ventaja.

El sistema de drenaje de agua en la capital de Uganda, Kampala, está proporcionando un medio de vida para cientos de personas que coleccionan basura tirada descuidadamente a la vía pública.

David Kibande gestiona cerca de 10 trabajadores que recopilan hasta 10 toneladas de desechos plásticos a la semana, y lo venden por el equivalente a unos siete centavos de dólar por kilo.

Kibande dijo que trabajadores del programa serían desempleados de no ganarse la vida al tiempo que ayudan a limpiar la ciudad.

Más de la mitad de la basura en la capital de Uganda queda sin recoger por los servicios municipales, los que cuentan con poco personal y financiación insuficiente.

Gran parte de la basura termina en los canales de drenaje, cursos de agua naturales, calles y parcelas no desarrolladas. Las autoridades de medio ambiente dicen que alrededor de 600 toneladas de plástico se desechan en Kampala todos los días.

Empresas privadas, como el Instituto de Reciclaje de Plástico (PRI), a cargo de la empresa de bebidas sudafricana SABMiller, han intervenido para ayudar a reducir los residuos al emplear personas que recojan residuos plásticos para su reciclaje.

La planta de Kampala recicla 650 kilogramos de plástico por hora y más de tres millones de kilogramos al año.

"Yo diría que está funcionando. Si no hubiese plantas de reciclaje significaría que todos los plásticos que estamos recogiendo ahora mismo estarían en los ríos y en las calles", dijo Jean-Baptiste Bitamazire, un gerente de planta PRI.

Los plásticos se clasifican, lavan y se procesan para la fabricación de otros productos de plástico, incluyendo baldosas y tejas.

A un continente de distancia, una iniciativa privada denominada "Organizmo” enseña a estudiantes cómo mezclar botellas de plástico con arena, arcilla y paja para construir viviendas sostenibles en el centro de Colombia.

"Si podemos entender cómo descartamos y consumimos, y lo incorporamos a los ciclos que nos rodean, eso puede crear ciertas prácticas de reciclaje, reutilización, conocimiento de la tierra", dijo Ana María Gutiérrez, directora y fundadora de Organizmo.

Estudiantes colombianos y de otros países aprenden a utilizar los residuos y materiales naturales para construir casas de granjas "verdes", que incluyan sistemas de tratamiento de agua-lluvia y baños ecológicos.

Lucía Cano, una arquitecto de España, dijo que fue a Colombia a aprender cómo incluir el cuidado del medio ambiente en su profesión.

"El 40 por ciento de las emisiones de carbono provienen de la construcción en todo el mundo. Así que si nosotros, los arquitectos, queremos construir, debemos tener en cuenta el daño potencial a nuestras generaciones, y que podría destruir a la madre naturaleza", dijo Cano.

Ambientalistas señalan a menudo que la conservación de la naturaleza y sus recursos no tiene por qué ser cara. En su mayoría, sólo se necesita iniciativa y persistencia para desarrollar buenos hábitos.

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