El presidente estadounidense, Joe Biden, escuchará las opiniones del mundo musulmán sobre la guerra en Gaza durante una reunión con el presidente indonesio, Joko Widodo, en la Casa Blanca el lunes por la tarde.
Widodo está en Washington para elevar las relaciones diplomáticas a “asociación estratégica integral”, la más alta en la clasificación diplomática del país.
Los líderes están muy separados en sus puntos de vista sobre el conflicto, con el apoyo inquebrantable de Biden a Israel y Widodo exigiendo un alto el fuego inmediato en Gaza y apoyando a una comisión de las Naciones Unidas que ha estado recopilando pruebas de crímenes de guerra presuntamente cometidos por ambos lados desde octubre. 7 ataque de Hamás.
Widodo se reunirá con Biden recién salido de una cumbre de emergencia de la Organización de Cooperación Islámica (OCI) en Riad, Arabia Saudita, el fin de semana pasado.
La cumbre reunió a 57 estados, en su mayoría musulmanes, incluida la Liga Árabe. Su comunicado rechazó la justificación de Israel de sus acciones en Gaza como autodefensa y exigió el fin inmediato de la guerra. Pidió el cese de la venta de armas a Israel y un mayor acceso a la ayuda humanitaria.
En una declaración a la prensa virtualmente desde Washington el domingo por la noche, Widodo dijo que entregará las resoluciones de la cumbre a Biden. "Israel debe asumir la responsabilidad por las atrocidades que ha cometido", afirmó.
El presidente Biden “escuchará atentamente lo que escuchó el presidente Widodo y cuáles son sus perspectivas con respecto a las conversaciones que acaba de emprender en Arabia Saudita y con otros líderes árabes y de Medio Oriente”, dijo un alto funcionario de la administración a la VOA durante una sesión informativa el domingo.
Si bien existe una enorme brecha entre los dos en cuanto a los llamados inmediatos a un alto el fuego, que Estados Unidos cree en este momento sólo beneficiará a Hamás, Washington está buscando un punto de convergencia con Yakarta más adelante. Indonesia no es un actor regional como Egipto, Jordania o Qatar con roles clave en los objetivos inmediatos de la administración, como asegurar la liberación de rehenes y establecer corredores humanitarios hacia Gaza.
Como país de mayoría musulmana más grande, la voz de Yakarta tiene influencia en los planes a mediano y largo plazo de la administración para resolver el conflicto y trabajar hacia un camino hacia la paz. En Indonesia viven unos 229 millones de musulmanes, lo que representa el 87% de la población. Eso es el 13% de la población musulmana del mundo.
“Paz justa, la solución de dos Estados, recursos sustanciales que serán necesarios para reconstruir y dar esperanza a las vidas destrozadas. Creo que esas son áreas en las que esperamos trabajar estrechamente con Indonesia para darle su papel de liderazgo”, dijo el funcionario.
Como muchos países musulmanes, Indonesia lleva mucho tiempo proporcionando ayuda a los palestinos, incluido un hospital en el norte de Gaza. Los administradores del hospital dijeron a la VOA que los alrededores han sido golpeados por ataques aéreos israelíes y están al borde del colapso debido a la falta de suministros y combustible.
La visita oficial de Widodo, que fue organizada para calmar los ánimos después de que Biden se saltara la cumbre de la ASEAN organizada por Indonesia en septiembre y en su lugar fuera a Hanoi, será un delicado acto de equilibrio para Widodo.
Los observadores dicen que debe hablar con la suficiente fuerza para representar las pasiones en la OCI y evitar daños políticos en casa, donde se realizan manifestaciones masivas antiisraelíes y antiestadounidenses. Las manifestaciones han sacudido las principales ciudades. Además, dicen que debe tener cuidado de no poner en peligro el progreso de una larga lista de intereses comunes, incluido un acuerdo sobre minerales críticos y las crecientes ambiciones de China en el Indo-Pacífico.
Plan de trabajo de minerales críticos
Indonesia busca un acuerdo de libre comercio limitado con Estados Unidos, similar al que Estados Unidos firmó con Japón en marzo, para incluir sus exportaciones de níquel bajo la Ley de Reducción de Inflación de Estados Unidos de 2022, o IRA. El IRA, la legislación clave de Biden sobre cambio climático y energía limpia, ofrece incentivos fiscales para impulsar la fabricación nacional de vehículos eléctricos o EV.
El proyecto de ley incluye disposiciones para créditos fiscales al consumidor para la compra de vehículos eléctricos producidos con minerales críticos de origen nacional o de un país que tenga un acuerdo de libre comercio con Estados Unidos.
Indonesia, que cuenta con las mayores reservas de níquel del mundo (un mineral clave en la producción de vehículos eléctricos) y aspira a convertirse en un centro mundial de vehículos eléctricos, está interesada en un acuerdo de este tipo. Mientras tanto, la administración Biden quiere asegurar una cadena de suministro para su ambicioso objetivo de garantizar que dos tercios de los turismos nuevos y una cuarta parte de los camiones pesados nuevos vendidos en Estados Unidos sean todos eléctricos para 2032.
La administración está buscando un proceso con Yakarta hacia una “asociación importante”, dijo el funcionario. Washington, sin embargo, ha expresado preocupación por la dependencia de Indonesia de la inversión china en su industria minera, así como por cuestiones laborales y ambientales en sus prácticas mineras.
La pareja anunciará un "plan de trabajo" para explorar una asociación en minerales críticos, dijo un segundo funcionario de la administración, para "asegurarnos de que nuestros dos sistemas estén preparados para avanzar juntos". El funcionario subrayó que cualquier camino a seguir acordado debe estar de acuerdo con los "más altos estándares laborales y ambientales".
El plan ha recibido rechazo por parte de algunos miembros de la industria minera estadounidense, que ha recibido financiación como parte de los esfuerzos de la administración Biden para impulsar la producción nacional de níquel, litio y otros metales necesarios para los vehículos eléctricos.
“Al final del día, ni el presidente ni el Congreso pueden apoyar un plan que facilita que los fondos de los contribuyentes estadounidenses vayan a empresas chinas que extraen y refinan minerales críticos de Indonesia a través de un acuerdo comercial que no incluye protecciones ambientales y laborales”, Julie C. Lucas , dijo a la VOA en un comunicado.
Porcelana.
Biden y Widodo elevarán las relaciones diplomáticas a una “asociación estratégica integral”, un estatus que Yakarta ya comparte con Beijing. Bajo Widodo, Indonesia ha adoptado el enorme proyecto de infraestructura de China conocido como la Iniciativa de la Franja y la Ruta, atrayendo una cantidad récord de inversión china. Ocupa el segundo lugar después de Pakistán en términos de valor de proyectos BRI: 20.300 millones de dólares y 71 proyectos en funcionamiento.
Los observadores dicen que el presidente chino, Xi Jinping, considera el vasto archipiélago como un premio clave para expandir la influencia de Beijing en el Indo-Pacífico. El mes pasado, anunció una ampliación de la cooperación con Indonesia en industrias emergentes como la economía digital, la energía fotovoltaica y los vehículos eléctricos. La energía fotovoltaica implica convertir la luz en electricidad.
Si bien Yakarta depende en gran medida de las inversiones chinas, los observadores dicen que desconfía de los reclamos cada vez más firmes de Beijing sobre las aguas en disputa en el Mar de China Meridional. Como muchos países de la región, ha estado impulsando los vínculos militares con Washington.
Después de su escala en Washington, Widodo se dirige a San Francisco para la cumbre de Cooperación Económica de Asia Pacífico organizada por Estados Unidos. Biden se reunirá con Xi al margen de la cumbre de APEC y está dispuesto a aprovechar las conversaciones con Widodo para informarle sobre las opiniones regionales sobre Beijing.
Entre ellos se incluyen "cuestiones críticas como el Mar Meridional de China, lo que están viendo y con respecto a la diplomacia y el compromiso de China", dijo el primer alto funcionario.
La pareja también discutirá la crisis en Myanmar. Desde el golpe militar de febrero de 2021, la junta de Myanmar ha llevado a cabo una brutal represión a nivel nacional contra millones de personas que se oponen a su gobierno, ignorando las demandas de Indonesia y otros miembros de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático de un diálogo constructivo y un cese inmediato de la violencia. .
[Eva Mazrieva, Naras Prameswari y Rio Tuasikal contribuyeron a este informe]
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