Cuba responsabilizó este miércoles al gobierno de Estados Unidos del "crecimiento ostensible" del flujo migratorio irregular de isleños a través de Centroamérica, al avivar la crisis económica del país a través de sanciones y beneficiar a los cubanos con políticas migratorias diferenciadas a su llegada a ese país.
En un comunicado de su Cancillería, La Habana reconoció que "durante los últimos meses y semanas, el flujo migratorio irregular de ciudadanos cubanos a través del corredor centroamericano con destino a EEUU ha experimentado un crecimiento ostensible".
Cuba "ha alertado sobre la responsabilidad del gobierno de los EEUU con la emigración irregular y desordenada de cubanos que llegan o se proponen llegar a sus fronteras", destacó el ministerio de Exteriores en el texto.
La Habana publicó su denuncia después de conocerse la noticia de un accidente de tránsito en el que murieron al menos 10 migrantes cubanas, incluida una menor, y otros 17 isleños resultaron heridos, luego de que el camión de carga en el que viajaban volcó en el sur de México en camino a la frontera estadounidense.
El Departamento de Estado respondió a una consulta de la Voz de América sobre este tema.
“Apoyamos al pueblo cubano y buscamos apoyar su búsqueda de derechos humanos, libertad, prosperidad y un futuro de mayor dignidad”, respondió un portavoz del Departamento de Estado a una solicitud de comentarios, al tiempo que recordó los “aproximadamente 1.000 presos políticos” que permanecen tras las rejas en la isla.
“Creemos que el sector privado es la mejor esperanza de Cuba para generar desarrollo económico y empleo para mejorar los niveles de vida del pueblo cubano y reducir los altos niveles actuales de migración”, insistió el Departamento de Estado sobre las nuevas medidas.
Sobre el embargo, el portavoz subrayó que lleva mucho tiempo codificado como ley y sólo va a terminar “mediante una acción del Congreso o cuando se hayan cumplido los criterios legales para poner fin al embargo”.
Entre las exenciones y autorizaciones autorizadas están las exportaciones de alimentos, medicinas y otros bienes humanitarios a Cuba. Sólo en 2022, EEUU exportó casi 320 millones de dólares en productos agrícolas totales y autorizó 7.600 millones de dólares en ayuda humanitaria “que demuestran la buena voluntad de muchos estadounidenses que quieren ayudar al pueblo cubano”.
En repetidas ocasiones el gobierno de EEUU ha denunciado lo que considera violaciones de DDHH por parte del gobierno cubano hacia sus ciudadanos y ha entablado un diálogo sobre migración, con varias reuniones, tanto en La Habana como en Washington.
En septiembre pasado, la administración Biden anunció una serie de medidas para ayudar a los emprendedores cubanos dentro de sus esfuerzos por atender directamente las causas raíces de la migración y aliviar las restricciones.
El actual aumento en la migración irregular desde Cuba a EEUU, un éxodo con números récord en los últimos años, "incrementa, a su vez, la probabilidad de ocurrencia de hechos lamentables, como el reciente accidente vial en territorio mexicano", advirtió el comunicado.
A pesar de que la administración de Joe Biden aplicó en enero el parole humanitario a cubanos, venezolanos, haitianos y nicaragüenses con lo que disminuyó fuerte las altas cifras registradas por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés), La Habana insistió en señalar a EEUU.
A vueltas con el bloqueo
Según resaltó el canciller Bruno Rodríguez en la red social X, "el recrudecimiento del bloqueo en últimos años provoca limitaciones extraordinarias a economía y población cubanas, estimulando potencial migratorio", junto a una política migratoria que privilegia al cubano que llega a fronteras estadounidenses.
En los últimos tres años, el país caribeño ha sufrido una de las peores crisis económicas y de derechos humanos en su historia reciente. La falta de liquidez para solventar deudas y realizar compras de bienes indispensables, ineficiencias administrativas, la mala gestión y la endémica escasez, unido a las sanciones y restricciones impuestas por Washington, han ahogado a la isla e impulsado a cientos de miles de cubanos al exilio.
Las difíciles condiciones en la isla provocaron un histórico levantamiento el 11 de julio de 2021 y manifestaciones recientes, lo cual ha derivado en detenciones arbitrarias y la suspensión de libertades, según han denunciado varias organizaciones defensores de derechos humanos
El gobierno del presidente cubano Miguel Díaz-Canel volvió a la retórica dura contra sus contrapartes estadounidenses luego de que el exmandatario Donald Trump revirtiera en 2017 las políticas de acercamiento impulsadas dos años antes por su antecesor, Barack Obama, restricciones sostenidas en su mayoría por Joe Biden.
Además de mantener a Cuba en la lista de países patrocinadores del terrorismo, lo cual complica las vías de los cubanos para hacer negocios con socios de Washington, EEUU también otorga vías seguras a la residencia permanente a los isleños que califiquen bajo la inédita Ley de Ajuste Cubano, cuyo acceso actualmente se encuentra más limitado que antes.
"Es un asunto que se ha planteado oficialmente y sobre el que se ha discutido reiteradamente con el gobierno de los EEUU", insistió el comunicado oficial, replicado por los principales medios estatales en la isla.
De acuerdo con La Habana, el gobierno cubano continuará su trabajo y cooperación con sus pares en la región centroamericana para "prevenir la migración irregular, insegura y desordenada" e "impedir las salidas riesgosas que ponen en peligro la vida humana".
"El gobierno de Cuba insta al gobierno de los Estados Unidos, una vez más, a adoptar las medidas necesarias para impedir las trágicas consecuencias de la emigración irregular y reafirma su compromiso con una migración regular, segura y ordenada", concluyó el texto.
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