Las autoridades rusas dijeron que las acusaciones de que sus atletas son parte de un “dopaje sistemático” carecen de fundamento e insistieron que sus políticas se adhieren estrictamente a las de la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) y las del Comité Olímpico Internacional (COI).
La declaración fue divulgada un día después que la AMA emitió un reporte que implica a atletas, entrenadores, médicos y a varias instituciones rusas, incluyendo la agencia nacional antidopaje y a un laboratorio moscovita que manejó las pruebas antidopaje de las Olimpiadas de Sochi en 2014.
En sus 323 páginas, el reporte delata cómo las autoridades rusas "cobraron a algunos atletas por esconder positivos"; la destrucción de 1.417 muestras sospechosas; la forma en que se utilizaba un laboratorio secreto en Moscú para discernir cuántos análisis enviar al oficial y cuántos no; o cómo "intimidaron, acosaron y amenazaron" a los responsables de la lucha antidopaje de los Juegos de Sochi 2014.
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, dijo a los reporteros el martes que no se ha presentado todavía ninguna evidencia que respalden las acusaciones.
Paralelamente, el Ministerio de los Deportes de Rusia emitió su propia declaración en la que dice estar al tanto de los problemas en el atletismo ruso y declara su compromiso de lugar contra el doping en el deporte.
El ministerio dice estar listo para cooperar con la AMA para eliminar las violaciones de su propia agencia antidopaje y su laboratorio.
El reporte de la AMA recomienda al COI y a la Federación Internacional de Atletismo (FIA) suspender a Rusia de las próximas competiciones, incluidos los Juegos de Río 2016.
