El mercado laboral estadounidense creció en agosto al añadirse 156.000 nuevas plazas de trabajo, y aunque el incremento fue menos de lo esperado, la mayor parte de los negocios siguen teniendo confianza en una economía que se recupera por noveno año consecutivo de la llamada Gran Recesión.
El índice de desempleo subió una décima de punto, de 4,3%a 4,4%, según dijo el Departamento de Trabajo. De igual manera el crecimiento laboral en junio y julio disminuyó al ser revisado, pero con un promedio mensual de 176.000 nuevas plazas de trabajo.
Una medida de la confianza del consumidor en agosto alcanzó su nivel más alto en 16 años. La inflación sigue siendo baja, los sueldos promedio por hora han aumentado un 2,5%, la bolsa de valores ha crecido un 10% y la sensación general es de que la economía se encuentra en un buen momento.
Y sin embargo, en algunos aspectos, no todo es color de rosa. Las ventas de autos han disminuido. Menos viviendas son puestas al mercado y la reforma impositiva prometida por el presidente Donald Trump que supuestamente daría un mayor impulso a la economía, ni siquiera ha sido presentada y aguarda un incierto camino en el Congreso.
El reporte de empleo de agosto mostró que más o menos la misma cantidad de personas tenían empleo o buscaban u no tanto en julio como en agosto.
