![Los restaurantes, aerolíneas, hoteles y muchos otros negocios están en la lista de los que presentan más dificultades para retomar las labores, seis meses después de que impactó el COVID-19 en EE.UU. [Archivo]](https://gdb.voanews.com/14955eee-7da9-4978-a6c9-2d07357a5453_w250_r1_s.jpg)
El Departamento del Trabajo de Estados Unidos informó el jueves que la pasada semana 870.000 personas solicitaron ayuda económica por desempleo, un ligero aumento respecto al dato anterior de 860.000, en otra señal de que la pandemia sigue impactando a sectores de la economía estadounidense.
Restaurantes, aerolíneas, hoteles y muchos otros negocios están en la lista de los que presentan más dificultades para retomar las labores, seis meses después de que impactó el COVID-19 en el país.
La cifra coincide con la evidencia de que algunos estadounidenses despedidos recientemente enfrentan retrasos en la entrega de la prestación por desempleo, al tiempo que las agencias estatales intensifican los esfuerzos por combatir casos fraudulentos y despejar el camino de solicitudes acumuladas.
Las autoridades de California, por ejemplo, han anunciado que dejarán de procesar nuevas solicitudes por dos semanas en un intento por reducir las acumulaciones y evitar atender casos fraudulentos.
En el estado de Pensilvania se ha detectado que hasta 10.000 presos están recibiendo la ayuda indebidamente.
El Departamento del Trabajo señaló el jueves que el número de personas que continúa recibiendo la prestación por desempleo se redujo a 12,6 millones.
El constante declive en esa cifra en los últimos meses refleja que algunos de los desempleados están siendo recontratados, pero también indica que a otros se les ha agotado su ayuda regular por desempleo, la cual dura seis meses en la mayoría de los estados.
Las solicitudes de ayuda por desempleo se dispararon en la primavera después de que el brote viral generó el cierre repentino de negocios en todo el país, eliminó decenas de millones de empleos y detonó una recesión profunda. Desde entonces, al tiempo que los estados reactivaban lentamente sus economías, se ha recuperado cerca de la mitad de los empleos que se perdieron inicialmente.
Cifras indican no obstante que el crecimiento laboral se ha ido desacelerando. En la mayoría de los sectores económicos, los empleadores se muestras reacios a contratar a nuevos empleados ante una profunda incertidumbre sobre el rumbo que tomará la pandemia.
