Autoridades de EE.UU. y Gran Bretaña están intensificando su cooperación para combatir la mutilación genital femenina, organizando operaciones conjuntas en los aeropuertos de Londres, Nueva York y otros lugares para crear conciencia sobre un problema que afecta a millones de niñas y mujeres en todo el mundo.
La policía y las agencias de seguridad fronteriza en ambos lados del Atlántico han firmado un nuevo acuerdo para compartir información de inteligencia acerca de cuándo y dónde las víctimas podrían caer en manos de perpetradores del procedimiento conocido como mutilación genital femenina, y ayudar a identificar a los perpetradores.
La semana pasada, los funcionarios también se enfocaron en los centros de viaje, incluidos los aeropuertos de Heathrow, JKF y Eurostar, acercándose a personas que viajan desde países donde la práctica es común y alentándolos a informar cualquier inquietud.
La mutilación de los genitales externos de las niñas por razones no médicas se practica en África, Medio Oriente y Asia. También afecta a las comunidades de inmigrantes en Europa y los EE.UU.