El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, se reunió el miércoles con ejecutivos de grandes empresas para discutir la campaña de vacunación contra el COVID-19 entre los trabajadores, a medida que aumentan las infecciones en la nación entre los no vacunados.
Biden insistió el jueves en que el Departamento de Trabajo planea imponer un requisito de vacunación a las empresas que empleen al menos a cien personas y que éstas deberán exigir a los trabajadores estar completamente vacunados o que proporcionen una prueba negativa al menos una vez a la semana.
Cerca de 100 millones de empleados estarían sujetos a los requisitos, dijo el presidente.
Los nuevos requisitos de vacunación y pruebas son parte de un impulso más amplio de la Administración Biden para contener la propagación de la variante delta. Esta variante es la principal causa del aumento en las infecciones, hospitalizaciones y muertes en EE. UU.
Aunque las vacunas son gratuitas y están ampliamente disponibles, solo el 55% de los estadounidenses han sido completamente vacunados, según el Centro de Investigación de Coronavirus de la Universidad Johns Hopkins.
Si bien la Mesa Redonda de Negocios y algunos otros grupos empresariales apoyan los requisitos de vacunación y pruebas de la Casa Blanca, algunos legisladores republicanos han amenazado con demandar a la administración demócrata, argumentando que Biden se ha excedido en su autoridad.
Un funcionario de la Casa Blanca dijo que se espera que la reunión sirva "como un grito de guerra para que más empresas en todo el país den un paso adelante e instituyan medidas similares".
* Parte de la información de este informe fue proporcionada por Associated Press y Reuters.
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