Aunque se estiman entre 8 y 10 horas para que el barco crucero Triumph de la empresa Carnival llegue a tierra, los más de cuatro mil pasajeros a bordo y sus familiares están más tranquilos al poder, por lo menos, divisar la embarcación a la distancia desde el puerto de Mobile en Alabama.
El crucero quedó varado en altamar en el Golfo de México, a 150 millas de la península de Yucatán, desde el domingo luego que presentara desperfectos mecánicos como resultado de un incendio.
En la tarde, cuando se inició la fase de remolcado, uno de los cables se rompió y el crucero de nuevo quedó a la deriva. Los ingenieros al frente de la operación lograron solucionar el problema y reanudar el lento regreso a casa.
Algunos pasajeros ya han logrado comunicarse al tener señal en sus aparatos móviles.
Los viajeros informaron que las condiciones al interior del barco eran preocupantes debido a la falta de electricidad y conforme pasaron los días expresaron que no tenían alimentos ni agua suficientes. De igual manera el acceso a los baños se estaba convirtiendo en un problema.
Algunos familiares han llegado hasta Alabama para recibir a sus seres queridos después de vivir días de angustia.
El jueves Carnival informó que han preparado un plan para asistir a los pasajeros de tal manera que lleguen a Houston lo más pronto posible y bajo las mejores condiciones.
Tienen coordinado autobuses para quienes quieran ser transportados a Galveston o Houston de inmediato. También han dispuesto transporte terrestre para que los pasajeros que prefieran descansar puedan llegar a Nueva Orleans a solo dos horas de viaje y quedarse en un hotel. Carnival confirmó que han reservado 1,500 habitaciones de hotel.
Los que decidan quedarse en Nueva Orleans serán trasladados por avión el viernes a Houston. Todos los gastos serán cubiertos por Carnival que también informó que indemnizará a los pasajeros que vieron interrumpido su viaje.
El crucero quedó varado en altamar en el Golfo de México, a 150 millas de la península de Yucatán, desde el domingo luego que presentara desperfectos mecánicos como resultado de un incendio.
En la tarde, cuando se inició la fase de remolcado, uno de los cables se rompió y el crucero de nuevo quedó a la deriva. Los ingenieros al frente de la operación lograron solucionar el problema y reanudar el lento regreso a casa.
Algunos pasajeros ya han logrado comunicarse al tener señal en sus aparatos móviles.
Los viajeros informaron que las condiciones al interior del barco eran preocupantes debido a la falta de electricidad y conforme pasaron los días expresaron que no tenían alimentos ni agua suficientes. De igual manera el acceso a los baños se estaba convirtiendo en un problema.
Algunos familiares han llegado hasta Alabama para recibir a sus seres queridos después de vivir días de angustia.
El jueves Carnival informó que han preparado un plan para asistir a los pasajeros de tal manera que lleguen a Houston lo más pronto posible y bajo las mejores condiciones.
Tienen coordinado autobuses para quienes quieran ser transportados a Galveston o Houston de inmediato. También han dispuesto transporte terrestre para que los pasajeros que prefieran descansar puedan llegar a Nueva Orleans a solo dos horas de viaje y quedarse en un hotel. Carnival confirmó que han reservado 1,500 habitaciones de hotel.
Los que decidan quedarse en Nueva Orleans serán trasladados por avión el viernes a Houston. Todos los gastos serán cubiertos por Carnival que también informó que indemnizará a los pasajeros que vieron interrumpido su viaje.
