La Casa Blanca condenó los ataques iraníes con cohetes contra los Altos del Golán ocupados por Israel como un "desarrollo inaceptable y altamente peligroso para todo el Medio Oriente".
En una declaración emitida el jueves por la mañana, la Casa Blanca dijo que el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (IRGC) "tiene plena responsabilidad por las consecuencias de sus acciones imprudentes" y advirtió a la Guardia y sus "representantes militantes" que no den "más pasos provocativos".
Las fuerzas israelíes desencadenaron un fuerte bombardeo contra instalaciones militares iraníes en Siria el jueves en lo que Israel denominó una represalia por un bombardeo de cohetes iraníes en sus posiciones en los ocupados Altos del Golán, la confrontación militar más seria entre los dos enemigos acérrimos hasta la fecha.
Israel dijo el jueves que sus aviones de combate atacaron decenas de objetivos militares iraníes dentro de Siria durante la noche en respuesta a los ataques. El ejército israelí dijo que sus ataques aéreos se concentraron en sitios de inteligencia, almacenamiento de armas y centros logísticos, y que los aviones también destruyeron varios sistemas de defensa aérea sirios.
También advirtió que "no permitiría que la amenaza iraní se establezca en Siria" y dijo que el gobierno de Siria será responsable de "todo lo que ocurra en su territorio".
El ministro de Defensa de israel, Avigdor Lieberman, dijo en una conferencia de seguridad que su país atacó "casi toda la infraestructura iraní en Siria".
Los dos rivales han luchado durante mucho tiempo entre sí a través de representantes, y con el nuevo intercambio cada uno parecía estar enviando una advertencia de que un enfrentamiento directo entre ellos podría escalar rápidamente. "Si tenemos lluvia, recibirán una inundación", advirtió el ministro Lieberman.
Reacciones
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, apuntó que los ataques contra objetivos iraníes en Siria eran "apropiados" porque la nación del Golfo Pérsico "cruzó una línea roja".
Netanyahu también advirtió a Siria que Israel tomaría represalias si el ejército sirio actuaba contra su país. "Estamos en medio de una batalla prolongada y nuestra política es clara: no permitiremos que Irán se atrinchere militarmente en Siria", precisó Netanyahu.
Irán es un aliado sirio, y su ejército ha estado apoyando al presidente Bashar al-Assad. El Ministerio de Asuntos Exteriores de Siria dijo que los ataques de Israel son el "comienzo de una nueva fase de agresión" contra Siria y no hará más que "aumentar las tensiones en la región".
Los medios iraníes describieron el ataque israelí como "sin precedentes", pero no hubo un comentario oficial iraní sobre las afirmaciones de Israel.
Irán ha prometido tomar represalias por repetidos ataques aéreos israelíes contra sus fuerzas en Siria. Pero pareció calibrar cuidadosamente su respuesta atacando los Altos del Golán, que Israel anexó en 1981 en una medida que no es reconocida internacionalmente, en lugar de atacar a Israel propiamente dicho.
Teherán desconfía de una conflagración militar más amplia con Israel que pueda poner en peligro sus logros militares en Siria en un momento en que intenta rescatar el acuerdo nuclear internacional y puede verse limitado en su capacidad de devolver el golpe.
Serguei Lavrov, el ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, otro de los patrocinadores de Assad, dijo que los ataques aéreos israelíes fueron "un acontecimiento muy alarmante" e instó tanto a Israel como a Irán a evitar provocarse mutuamente.
El secretario de Relaciones Exteriores británico, Boris Johnson, condenó los ataques de Irán, instó a Irán a abstenerse de realizar más acciones que pudieran desestabilizar la región, y pidió a Rusia que presione a Siria para que trabaje hacia un acuerdo político más amplio.
La canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, Emmanuel Macron, pidieron una reducción de las tensiones entre las dos partes.
En las Naciones Unidas el Secretario General, Antonio Guterres, instó a "un alto inmediato a todos los actos hostiles" y a acciones de provocación para evitar "una nueva conflagración" en el Medio Oriente.
El portavoz de la ONU Stephane Dujarric dijo a los periodistas que la fuerza de mantenimiento de la paz de la ONU en los Altos del Golán ha mantenido contacto con el ejército sirio e israelí, "instando a ambas partes a ejercer la máxima moderación" y cumplir el acuerdo de alto el fuego de 1974.
Dujarric afirmó que el secretario general siguió "con suma preocupación" los informes de la noche a la mañana de los lanzamientos de misiles desde Siria contra las posiciones israelíes y los ataques de represalia de Israel y se siente aliviado por la "normalización parcial de la situación" del jueves.
El portavoz de la ONU dijo que Guterres está "muy comprometido" y ha estado en contacto "con varias personas en varios niveles" sobre los ataques.