El papa Francisco celebró en la Basílica de San Pedro, en Roma, la fiesta de la Epifanía que recuerda la visita de los Reyes Magos al Niño Jesús, enviando sus mejores deseos de buenaventura a los cristianos ortodoxos en todo el mundo.
En Rusia, cristianos ortodoxos, celebraron la Nochebuena asistiendo a las iglesias este martes. Su Navidad se celebra el 7 de enero, según el calendario juliano.
Para ellos, la Navidad es la segunda fiesta religiosa más importante del año después de las Pascuas. Muchos fieles también consideran este día como el inicio del Año Nuevo.
En el sur y el este de Europa diferentes rituales marcan la Fiesta de la Epifanía.
En Estambul, Turquía, el patriarca ecuménico Bartolomeo I, líder espiritual de los cristianos ortodoxos del mundo, encabezó un servicio en la Catedral de San Jorge para celebrar el día en que la iglesia ortodoxa griega conmemora el bautismo de Jesucristo.
Más tarde, cientos de miembros de la comunidad de cristianos ortodoxos griegos se reunieron a orillas del llamado Cuerno de Oro, un histórico estuario a la entrada del Estrecho de Bósforo, para la tradicional ceremonia de la Bendición de las Aguas, que se lleva a cabo el día de la Epifanía.
El Patriarca lanzó una cruz bendecida a las frías aguas y una docena de fieles se lanzaron a buscarla. Se cree que la persona que la encuentra recibe muchas bendiciones en el nuevo año.
Escenas similares se vivieron en Grecia. Representantes de la Iglesia Griega, funcionarios del gobierno local y fieles se reunieron en Faliro, un suburbio de la costa de Atenas, para mirar a los valientes fieles que hicieron frente a las heladas temperaturas con el fin de rescatar una gran cruz, la cual entregan luego al sacerdote, que la sostiene mientras los nadadores la besan.
En las montañas de Kalofer, en el centro de Bulgaria, decenas de hombres vestidos en trajes tradicionales y portando banderas nacionales entraron a las heladas aguas del río Tundzha.
Liderados por un tamborilero y varios gaiteros los hombres bailaron cerca de una hora dentro del agua, apartando pedazos de hielo. Un brandy casero de ciruelas y vino rojo les ayudaba a combatir el frío.
Entretanto, en Belén de Judea los cristianos ortodoxos iniciaron las celebraciones de Nochebuena con un desfile de los niños exploradores y la tradicional procesión encabezada por el patriarca ortodoxo griego de Jerusalén, Teófilo III, que pasa por la Plaza del Pesebre hasta llegar a la Iglesia de la Natividad, construida sobre el lugar donde según la tradición cristiana, nació Jesucristo.
Las celebraciones de la Nochebuena continúan por la tarde, y concluyen con una misa de medianoche oficiada por los líderes ortodoxos cristianos.
