El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, criticó al gobierno federal por su manejo de la pandemia del coronavirus, mientras se dirigía hacia Savannah, Georgia, a ofrecer equipo y su experiencia a los funcionarios de esa golpeada ciudad.

“Me siento obligado a ir porque sé un poco sobre esto. He estado en el medio del asunto”, le dijo a los periodistas en el aeropuerto John F Kennedy, de Nueva York. “Estamos en posición para ayudar. Nuestros números han bajado. Tenemos el personal médico, tenemos los equipos, tenemos los respiradores artificiales y tenemos el conocimiento de cómo hacer esto”.

Cuomo dijo que está cumpliendo un ofrecimiento que hizo cuando Nueva York estaba cerca de su pico para ayudar a otros estados que lo necesitasen. En marzo y abril, Nueva York fue el epicentro de la pandemia del coronavirus en Estados Unidos, registrando entonces unas 13.000 infecciones confirmadas diarias, y por 10 días en abril, más de 700 muertes por día. Ahora el estado está registrando menos de 1.000 nuevas infecciones cada día y las muertes diarias han caído a cifras de un o dos dígitos.

El gobernador dijo que iría a cualquier parte del país que necesitara ayuda. Y señaló que Nueva York también está enviando medicamentos y suministros a Florida y la ha ofrecido a Texas, los dos más afectados estados en este momento.

Georgia tiene más de 143.000 casos confirmados y casi 3.200 muertes. Cuomo dijo que su misión ahí incluye llevar miles de piezas de protección personal, así como ofrecer consejos sobre cómo lidiar con hospitales sobrepasados y cómo montar programas de pruebas y de monitoreo de contactos. Nueva York le hace pruebas a más de 50.000 personas a diario. Él y su pequeño equipo se reunirán con el alcalde de Savannah, Van Johnson y sus asesores.

"En negación"

En un ataque a la administración Trump, Cuomo, un demócrata, acusó al gobierno federal de estar “en negación” sobre el virus.

“Aún rehusa de hacer caso a la ciencia. Aún piensa que vencerá el virus jugando a la política”, dijo Cuomo. “Cinco meses después, este país sigue completamente sin estar preparado para lidiar con esto”.

El presidente Donald Trump ha desestimado las críticas del manejo que su administración ha dado a la pandemia, atribuyéndole las altas cifras de casos a un amplio programa de pruebas, que él dice alteran las cifras.

En una entrevista en el programa de televisión “Fox News Sunday”, Trump reconoció que hay lugares calientes de coronavirus, pero agregó que “estará bajo control”. Y desestimó la amenaza, diciendo que muchos de los que están contrayendo el virus son jóvenes que se recuperarán muy pronto.

Estados Unidos encabeza al mundo en infecciones confirmadas de coronavirus, ahora con caso 3,8 millones de casos y más de 140.000 muertes.

Nueva York avanza a fase final de reapertura

Mientras tanto, al avanzar la ciudad de Nueva York a la fase final de su reapertura, la aglomeración de jóvenes en bares y restaurantes, frecuentemente sin mascarillas, ha generado alarma entre funcionarios, incluyendo al gobernador Cuomo.

“Es un problema,” Cuomo le dijo a los periodistas. “Si tienes congregaciones de personas, van a regar el virus”.

Dijo que el comportamiento de estas personas jóvenes está poniendo en peligro el éxito de Nueva York y les urgió no ser “estúpidos”, y pidió a los gobiernos y policías locales a hacer cumplir las reglas de distanciamiento social.

Mientras la ciudad implementa su cuarta fase de reapertura, varias cosas se han retrasado, incluyendo la reapertura de salas de cine, museos, centros comerciales, restaurantes bajo techo y bares. Los eventos deportivos están reiniciando, pero sin fanáticos en los estadios. Zoológicos, jardines botánicos y la filmación de películas o programas de televisión pueden reactivarse.