El presidente Barack Obama tiene la intención de cerrar la prisión militar estadounidense de Bahía de Guantánamo, en Cuba, a pesar de las críticas dentro de Estados Unidos.
Obama afirma que su plan original de cerrar el campo de detención en Guantánamo para el próximo enero seguirá adelante, a pesar de la compleja tarea de presentar cargos contra los 240 detenidos que allí se encuentran o reubicarlos en otra parte.
En un discurso trasmitido a nivel nacional, desde Washington, Obama manifestó que la prisión de Guantánamo tenía como objeto “fortalecer la seguridad nacional pero que, en lugar de eso, ha debilitado a Estados Unidos y su autoridad moral en todo el mundo”.
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El campo de detención, construido en la instalación naval de Estados Unidos en Cuba, fue establecido tras los ataques terroristas a Estados Unidos en 2001.
La mayoría de los detenidos fueron capturados en Afganistán o Pakistán, durante operaciones militares contra terroristas de al-Qaeda, pero en Guantánamo también hay prisioneros de otros países.
Otras naciones no han estado dispuestas o no han podido aceptar detenidos de esa instalación y las complicaciones legales han entorpecido las gestiones para presentar cargos contra detenidos.
No obstante, Obama dijo que está decidido a poner fin a lo que llamó un “lío” que su Administración heredó cuando tomó posesión, hace cuatro meses.
Obama dijo que algunos de los presos en Guantánamo serán transferidos a prisión de máxima seguridad en Estados Unidos y juzgados en cortes estadounidenses, mientras que otros enfrentarán comisiones militares.
El Mandatario afirmó que su Administración hasta ahora ha aprobado la transferencia de 50 detenidos a otros países.