Uno de cada siete estadounidenses terminará con por lo menos 30 centímetros de nieve para el domingo y Washington podría recibir hasta un metro y medio de nieve.
La situación cambió por completo, los primeros copos fueron de postal, pero a medida que se acumularon y con vientos, de hasta 80 kilómetros por hora, prácticamente no se podía ver nada en las carreteras.
Los meteorólogos advierten que la capital estadounidense podría recibir hasta medio metro de nieve acumulada y advierten que el mayor problema será el viento.
Ante el peligro, la alcaldesa de Washington, Muriel Bowser, rogó a la población que no salga.
La situación en Nueva York podría ser peor, donde se espera una acumulación mayor y posibles apagones.
La tormenta podría dejar más de mil millones de dólares en daños, dijo el director del servicio meteorológico, Louis Uccelini.