Los jefes de policía de todo el mundo se reunieron el domingo en Dubái para la asamblea general de la Interpol donde seleccionarán un nuevo presidente luego de que el exlíder de la agencia fue detenido en China.
Meng Hongwei, que era viceministro de seguridad pública de China y también dirigía Interpol, desapareció durante un viaje a dicho país en septiembre. Más tarde, se supo que el ex funcionario Partido Comunista con décadas de experiencia en el aparato de seguridad chino fue detenido como parte de una purga generalizada contra funcionarios supuestamente corruptos o desleales bajo la administración autoritaria del presidente Xi Jinping.
Los estados miembro de Interpol también decidirán si aceptan a Kosovo como miembro de pleno derecho, lo que permitiría a los funcionarios presentar notificaciones rojas a funcionarios serbios que Kosovo considera criminales de guerra.
Las fichas rojas son alertas distribuidas por Interpol a todos los países miembro que identifican a una persona buscada para ser arrestada por otro país. Interpol dice que hay 57.289 avisos rojos activos en todo el mundo.
La Interpol actúa como un centro de intercambio de información para los servicios policiales nacionales que quieren perseguir a los sospechosos fuera de sus fronteras. El organismo, sin embargo, ha enfrentado críticas de que los gobiernos han abusado del sistema de avisos rojos para perseguir a los enemigos políticos y disidentes, a pesar de que su carta proclama explícitamente su neutralidad y prohíbe el uso de avisos de la policía por razones políticas.
Hace dos años, la Interpol introdujo nuevas medidas destinadas a fortalecer el marco legal en torno al sistema de notificaciones rojas. Como parte de los cambios, un equipo internacional de abogados y expertos primero verifica el cumplimiento de un aviso con las reglas y regulaciones de Interpol antes de que salga. Interpol también introdujo un cuerpo de apelaciones para los destinatarios con avisos rojos.
