Las condiciones meteorológicas en Buffalo mejoraron el martes luego que los temores de una catastrófica inundación causada por el derretimiento de la nieve disminuyeron considerablemente.
Si bien las posibilidades de nieve también son menores, fuertes vientos con ráfagas dehasta 104 kilómetros por hora han comenzado a soplar y podrían derribar árboles y cables de electricidad.
"Desde este momento, la situación no es tan problemática como podría haber sido", celebró Cuomo un día después de que recomendara a los habitantes que empacaran algunas pertenencias en caso de que tuvieran que desalojar sus casas.
"Pero reiteramos, continuará la incertidumbre hasta que sepamos cabalmente qué nos depara la Madre Naturaleza para el resto de la jornada y para mañana", agregó.
De igual manera, las alcantarillas de la ciudad parecían su capacidad para desalojar las corrientes de agua y solo fueron reportadas inundaciones de menores a moderadas cerca de algunos arroyos.
Las autoridades del estado han trasladado a la zona 425 bombas de agua y generadores, 55 embarcaciones, 3 helicópteros, 29 vehículos especiales y más de 180.000 sacos de arena con los que contener las aguas en caso sea necesario.