El ataque al Aeropuerto Internacional Hamid Karzai de Kabul el jueves ha puesto nuevamente los focos sobre el grupo Estado Islámico del Gran Jorasán o ISIS-K, como se le conoce en Estados Unidos, una facción declarada por la ONU como organización terrorista. Quiénes son y qué persiguen, te lo explicamos en la Voz de América.
El Gran Jorasán es una región de Asia Central dominada por el Estado Islámico (que conforma algún territorio de Irán, Afganistán y Paquistán). La facción local del EI surgió entre 2014 y 2015, según datos compilados por el Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales (CSIS).
¿Quiénes son sus cabezas visibles?
La primera figura en salir a la palestra al frente del grupo fue el ciudadano paquistaní Hafiz Saeed Khan, nombrado Primer Emir.
A Khan se le unieron otros militantes, como el ex jefe regional talibán Abdul Rauf Khadim, lo que hizo que la facción gozara de un rápido crecimiento.
Al ISIS-K se le atribuyen centenares de ataques contra la población civil en Afganistán y Pakistán, y muchos enfrentamientos con las fuerzas de Estados Unidos que permanecen desde 2001 en Afganistán.
¿Cuál es la postura de Estados Unidos?
En su lucha por detener el avance del grupo EI en el Medio Oriente, Estados Unidos anunció que intensificaría sus acciones militares para ir allanado el camino a su salida de Afganistán desde hace al menos tres años.
En 2018, bajo la administración del entonces presidente, el republicano Donald Trump, el secretario de Defensa Jim Mattis expuso parte de la estrategia estadounidense, que consistía en apoyarse en el buscado alto al fuego contra los talibanes.
"Si los talibanes aprovechan al máximo el alto el fuego en beneficio del pueblo afgano, entonces muchos de los activos de vigilancia que tenemos pueden reorientarse al ISIS-K, a Al-Qaeda y otros terroristas extranjeros que, en primer lugar, no tendrían que estar en Afganistán", explicó Mattis.
Por entonces, el Pentágono estimaba en 2.000 los combatientes del Estado Islámico del Gran Jorasán, sin embargo, funcionarios afganos calculaban que para entonces esas tropas insurgentes superaban las estimaciones de Washington.
La resolución de Naciones Unidas
El 14 de mayo de 2019, el Comité del Consejo de Seguridad de la ONU enlistó para sanciones a “personas, grupos, empresas y entidades asociadas” a ISIS, a Al-Qaeda y al Estado Islámico del Gran Jorasán.
Directamente la ONU hizo públicas las medidas de congelación de activos y prohibiciones de viajar a decenas de los principales directivos de ISIS-K.
Las sanciones fueron fundamentadas por “actividades continuas y múltiples actos terroristas criminales destinados a causar la muerte de civiles inocentes y otras víctimas, destrucción de bienes y socavación en gran medida de la estabilidad” en la región.