El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, comenzó a reorganizar la directiva de petróleos de Venezuela.
El mandatario realizó los cambios vía decreto, aunque mantuvo en la presidencia al ministro Rafael Ramírez.
Luis Cedeño, quien trabajó en la petrolera por 35 años y ahora forma parte de la recién elegida Mesa de la Unidad Democrática en Miami, asegura desde el exilio que Chávez y sus ministros están utilizando la situación como “un trapo rojo”.
“Es un aspecto político. Es para esconder y distraer al pueblo venezolano de los problemas como luz agua, delincuencia”.
El ex empleado de PDVSA ratifica que aunque realmente EE.UU. se verá afectado si Venezuela no escucha la advertencia que le hace el gobierno del presidente Barack Obama, la gran perdedora si se llegara a cortar el suministro de petróleo será la misma Venezuela, quien tendría que buscar nuevos compradores en el mercado internacional.
Por medio de un comunicado de prensa la Mesa de la Unidad Democrática asegura que el gobierno estadounidense se toma en serio las sanciones a la petrolera venezolana y espera que ésta limite sus negocios con Irán antes de levantar las sanciones impuestas recientemente.
