Suecia parece haber retirado algunos de los buques que participaban en la búsqueda de un submarino extranjero que se presume entró ilegalmente a sus aguas, pero se rehusaba a hablar de una desescalada de la situación.
El portavoz del ejército Erik Lagerstedt dijo que algunos barcos, incluyendo la corveta HMS Visby, regresaron a la base naval en Estocolmo para “mantenimiento”, pero aseguró que la búsqueda continúa y había entrado en una “nueva etapa”.
Los militares suecos buscan desde el viernes un submarino que, según reportes creíbles, incursionó en aguas suecas que se extienden desde la capital, Estocolmo, hasta el mar Báltico.
Un reporte del periódico Svenska Dagbladet dijo el viernes que un mini-submarino ruso tuvo una emergencia en aguas suecas, citando una conversación por radio en ruso en los canales de emergencias, que fue interceptada por la inteligencia sueca.
A ese reporte se agregó otro de la Associated Press que apunta a cómo el Concordia, un tanquero ruso que había estado por varios días en aguas suecas, comenzó su travesía hacia Rusia antes de dar la vuelta y regresar hacia Suecia en coincidencia con el llamado de emergencia.
La cacería en la que han participado barcos, helicópteros tropas recuerda la Guerra Fría y especialmente la película “La cacería del Octubre Rojo”, así como el incidente “Whiskey on the rocks”, en que un submarino espía ruso encalló cerca de una base naval sueca.
No se ha confirmado ni nadie ha mencionado oficialmente que el submarino sea ruso, pero la mayor parte de los analistas militares piensan que sí lo es.
Moscú ha negado repetidamente que sea suyo el submarino.
