La Corte Federal estadounidense rechazó una reestructuración electoral en Texas, tras considerar que los nuevos mapas fueron hechos con intención discriminatoria de las minorías étnicas, incurriendo en la violación de la Ley de Derechos Electorales.
Luego de analizar las pruebas, los tres jueces encargados del caso concluyeron que el nuevo plan del Congreso beneficiaba a los miembros titulares del parlamento de raza blanca, mientras que los distritos en donde predominan las minorías fueron objetos de cambios, por lo cual, la elección se realizará sobre una reestructuración provisional realizada por un tribunal local.
Meses antes al estado de Texas se le concedieron cuatro bancas adicionales a la Cámara de Representantes debido al aumento de la población, por lo que las autoridades siguieron muy de cerca la reestructuración del mapa electoral.
Por su parte, el procurador general de Texas, Greg Abbott, aseguró a través de su cuenta de Twitter que el estado recurrirá a la Corte Suprema para apelar la decisión; y afirmó por medio de un comunicado que “continuará defendiendo los mapas promulgados por la Legislatura de Texas".
Texas, gobernado por mayoría republicana, es un estado con antecedentes de discriminación, por lo que deberá contar con la aprobación federal para realizar algún cambio en las leyes electorales o en los mapas políticos.
Luego de analizar las pruebas, los tres jueces encargados del caso concluyeron que el nuevo plan del Congreso beneficiaba a los miembros titulares del parlamento de raza blanca, mientras que los distritos en donde predominan las minorías fueron objetos de cambios, por lo cual, la elección se realizará sobre una reestructuración provisional realizada por un tribunal local.
Meses antes al estado de Texas se le concedieron cuatro bancas adicionales a la Cámara de Representantes debido al aumento de la población, por lo que las autoridades siguieron muy de cerca la reestructuración del mapa electoral.
Por su parte, el procurador general de Texas, Greg Abbott, aseguró a través de su cuenta de Twitter que el estado recurrirá a la Corte Suprema para apelar la decisión; y afirmó por medio de un comunicado que “continuará defendiendo los mapas promulgados por la Legislatura de Texas".
Texas, gobernado por mayoría republicana, es un estado con antecedentes de discriminación, por lo que deberá contar con la aprobación federal para realizar algún cambio en las leyes electorales o en los mapas políticos.
