Como es costumbre cada año, este 8 de septiembre miles celebraron a la Virgen de la Caridad del Cobre, patrona de Cuba, en su santuario en Miami.
Fieles católicos de todas partes veneraron a “Cachita”, como le suelen llamar a la virgen a la que suelen atribuirle numerosos milagros.
“Aquí vine y me arrodillé ante ella y le supliqué que intercediera por la recuperación de mi salud, que todo fuese un error, que cuando llegase al salón de operaciones, estuviese sanada. Y a los 14 días fui a entrar al salón de operaciones y el médico me dijo ‘¿qué pasó, dónde está el cáncer?", dijo Yolanda Loyola a la Voz de América desde el santuario ubicado frente a la Bahía de Biscayne.
La Ermita, el Santuario Nacional de la Virgen de la Caridad, se llena de fieles católicos en cada celebración anual, donde el arzobispo de Miami, Thomas Wenski, celebra misa después de una tradicional peregrinación de la virgen.
“Muchos pensaban que esta era una fiesta de los cubanos, pero se ha vuelto más y más internacional. La gente viene aquí a este santuario porque está dedicado a la madre de Jesús, y la madre de Jesús es la madre de todos”, apuntó el Padre Alberto Cutié, un sacerdote de orientación anglicana.
Vestidos, girasoles y flores amarillas forman parte de las ofrendas a la Patrona de Cuba.
“Solamente hice este viaje para agradecerle a la Virgen mis 40 años”, dijo Érika Cardia, quien no es cubana y llegó toda vestida de amarillo.
Se espera que el sábado y domingo los peregrinos sigan llegando a celebrar a la virgen en La Ermita.
[Luis Felipe Rojas, periodista de VOA en Miami, contribuyó con este reporte]
