El presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskyy, pospuso todos sus próximos viajes al extranjero mientras el Ejército de Ucrania luchaba por contener un avance de primera línea por parte de las fuerzas del Kremlin, cuando el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, visitaba el miércoles una instalación de fabricación de drones en Kiev en el segundo día de una visita que significó para tranquilizar a los ucranianos sobre el continuo apoyo estadounidense.
Zelenskyy canceló todas las visitas al extranjero “que estaban planeadas para los próximos días”, dijo su oficina el miércoles en Telegram. El jefe de Estado ordenó a su equipo reprogramar las visitas.
"Agradecemos a nuestros socios su comprensión", decía el anuncio.
Se esperaba que Zelenskyy visitara España, y quizás Portugal, a finales de esta semana. No se dio ninguna razón para su decisión, pero Ucrania está teniendo dificultades para defenderse del último ataque ruso.
Blinken también recorrió una instalación de transbordo de cereales y una fábrica de biónica, elogiando la innovación y el ingenio ucranianos frente a las dificultades de la guerra.
“Ucrania ha tenido que adaptarse y ajustarse a esto y lo ha hecho de manera notable”, dijo Blinken sobre las exportaciones de granos que ahora se realizan por ferrocarril después de que las rutas marítimas tradicionales fueran interrumpidas por la invasión a gran escala de Rusia, que comenzó el 24 de febrero de 2022.
Las tropas rusas están presionando para lanzar una nueva ofensiva en la región de Kharkiv, en el noreste de Ucrania. Comenzó la semana pasada, marcando la incursión fronteriza más importante desde que comenzó la invasión a gran escala y obligando a casi 8.000 habitantes locales a huir de sus hogares. Junto con el esfuerzo de varias semanas de Moscú para aprovechar sus recientes avances en la región oriental de Donetsk, la guerra de más de dos años ha entrado en una etapa crítica para el mermado ejército de Ucrania.
En ese sombrío telón de fondo, con miles de tropas ucranianas enzarzadas en feroces batallas en ciudades y aldeas, Blinken prometió el martes el apoyo incesante de Estados Unidos al país, durante y después de la guerra. También trató de levantar el ánimo en Kiev, tocando la guitarra con una banda en un bar de la ciudad y comiendo pizza en un restaurante dirigido por veteranos.
Rusia está abriendo nuevos frentes para extender al ejército ucraniano, que carece de municiones y personal, a lo largo de una línea de frente de unos 1.000 kilómetros (620 millas), con la esperanza de que las defensas se derrumben. La artillería rusa y los ataques de sabotaje también han amenazado las regiones del norte de Ucrania, Chernihiv y Sumy.
Zelenskyy dijo en su discurso nocturno en video el martes que el ejército ha enviado refuerzos a las regiones de Kharkiv y Donetsk.
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