El nuevo jefe ejecutivo de la desacreditada automotriz Volkswagen dijo el miércoles que espera que la compañía pueda comenzar a realizar el llamado a servicio de vehículos en enero de 2016 y quizás finalice las reparaciones en todos los automóviles afectados por su escándalo de trampas en sus emisiones para fines de ese año.
Matthias Mueller dijo al diario alemán Frankfurter Allgemeine en una entrevista publicada el miércoles que tiene la esperanza de ajustar todos los 11 millones de vehículos afectados en un año.
Volkswagen ha estado bajo presión de las autoridades europeas para que anuncie un plan para resolver el escándalo, que ha resultado en la peor crisis de confianza en los 78 años de Volskwagen desde que las autoridades federales estadounidenses hicieran el anuncio el 18 de septiembre.
Autoridades estadounidenses encontraron que Volskwagen había equipado aproximadamente medio millón de automóviles diésel en EE.UU. con software que cambiaba los controles de contaminación durante las pruebas, pero cerraba los dispositivos anti contaminación durante el manejo normal. Volskwagen admitió pocos días después que el software había sido instalado en 11 millones de vehículos en todo el mundo.
Entre tanto, el principal ejecutivo de VW en Estados Unidos, Michael Horn, testificará el jueves ante un panel del del Congreso sobre el escándalo que involucra al fabricante de autos alemán.
La noticias surge después que Volkswagen dijera que tomaría más de lo esperado investigar el escándalo, generando la perspectiva de meses de incertidumbre para los clientes, accionistas y su personal.