Israel informó que no tiene planes de llevar a cabo una operación militar inmediata en respuesta al atentado suicida palestino de este lunes en Tel Aviv que dejó nueve personas muertas.
Los medios indican que el ministro de Defensa israelí, Shaul Mofaz optó por postergar cualquier acción militar, en una reunión con funcionarios de Seguridad. Horas antes, un individuo perteneciente al grupo Jihad Islámica, detonó explosivos en un mercado de comidas rápidas en Tel Aviv. Por lo menos 60 personas resultaron heridas en la explosión.
El grupo militante palestino Hamás, que ahora controla el gobierno palestino, defendió el atentado como legítima respuesta a la agresión israelí. Pero, Estados Unidos, que calificó al ataque como “un acto deleznable que no tiene excusa”, condenó a Hamás por condonar el estallido.
El portavoz del Departamento de Estado, Sean McCormack, declaró que el gobierno liderado por Hamás alienta a los adolescentes a envolverse en explosivos para tratar de matar a civiles inocentes.