Asesor de Trump advirtió sobre peligro de pandemia de coronavirus

Personal médico se prepara para empezar a atender pacientes en un hospital de campaña en Seattle, Washington, uno de los primeros escenaros del brote en Estados Unidos.

Un asesor de temas comerciales de la Casa Blanca advirtió en dos memorandos sobre el peligro de una pandemia de coronavirus. Incluso después de ellos, el presidente Trump siguió desestimando por varias semanas el riesgo de la COVID-19.

El asesor de comercio de la Casa Blanca, Peter Navarro, advirtió en dos memorándums durante enero y febrero del enorme peligro que un brote masivo de coronavirus podría significar en término de vidas y daños económicos a los Estados Unidos. Pero a pesar de las advertencias, el presidente Donald Trump pasó varias semanas desestimando la gravedad del tema.

A finales de enero, Navarro estimó que unos 543.000 estadounidenses podrían morir a causa del virus que empezaba a detectarse en Estados Unidos. Un mes más tarde, Navarro escribió otro memorándum en el que habló de la posible muerte de entre uno y dos millones de estadounidenses.

"La falta de protección inmunológica o de una cura o vacuna podría dejar a los estadounidenses indefensos en el caso de un brote masivo de coronavirus en suelo estadounidense. Esta falta de protección eleva el riesgo de que el coronavirus evolucione en una gran pandemia, poniendo en peligro la vida de millones de estadounidenses”, dijo Navarro en su primer memorándum.

Los memorándums de Navarro, revelados por The New York Times y el sitio web Axios, son la más reciente evidencia de que algunos funcionarios de la Casa Blanca expresaron su preocupación por el coronavirus mucho antes de que el presidente hablara sobre la gravedad del asunto.

En el memorándum de enero, Navarro escribió que la administración Trump tenia que decidir con cuánta agresividad deseaba responder a la emergente amenaza del coronavirus. Dijo que las víctimas fatales y el daño económico serían relativamente bajos si el coronavirus resultaba ser como la gripe común.

Pero añadió que el “riesgo de un peor escenario con una pandemia no debería ser descartado”, en momentos en que los muertos seguían aumentando en China.

El 30 de enero, un día después del primer memorándum de Navarro, Trump dijo: “Creemos que tenemos todo muy bajo control. Tenemos pocos problemas en este país en este momento, cinco casos, y esas personas se están recuperando todos muy bien. Pero estamos trabajando con China y otros países, y creemos que tendrá un final muy bueno para nosotros… se los puedo asegurar”.

Trump bloqueó los vuelos provenientes de China a finales de enero, pero otro asesor de la Casa Blanca era muy escéptico de las advertencias de Navarro.

"El memo de enero me pareció un esfuerzo alarmista por generar atención a la agenda anti-China de Peter (Navarro), el cual presenta un campo de opciones de políticas artificialmente limitado”, escribió el otro asesor.

En el memorándum de febrero, Navarro dijo que “cualquier miembro de la Fuerza de Tarea de la Casa Blanca contra el coronavirus que quisiera ser cauteloso sobre destinar fondos para una crisis que podría ocasionar billones en daños económicos y millones de muertes, ha venido a la administración equivocada”.

Trump en Twitter

Despues de pequeños esfuerzos por combatir el virus, el presidente Trump firmó hace dos semanas un paquete de dos billones de dólares para el rescate de empresas en problemas y para ayuda económica a contribuyentes afectados por el brote. El paquete incluye pagos de 1.200 dólares para un 90 por ciento de los estadounidenses en las próximas semanas.

El 17 de marzo, Trump dijo: “yo pensaba que era una pandemia, antes que fuera llamada una pandemia”. Pero antes de eso, el líder estadounidense restó importancia al tema.

Semanas antes, el 24 de febrero, Trump dijo que el coronavirus “estaba bajo control” y que la Bolsa de Valores “está empezando a lucir muy bien”. Los índices de la bolsa se han comportado sumamente erráticos en el ultimo mes, con los precios de las acciones bajando de sus precios altos en febrero.

Muertes en EE.UU.

Estados Unidos ha sufrido unas 11.000 muertes, con más de 378.000 casos confirmados de la COVID-19. Funcionarios estadounidenses consideran que entre 100.000 y 240.000 muertes serían posibles. Aunque el Secretario de Salud, general Jerome Adams, dijo el martes que piensa que no llegarán a los 100.000.

"Será una semana dura, pero el pueblo estadounidense tiene el poder para cambiar la trayectoria de esta epidemia si nos unimos como lo hemos hecho en tragedias anteriores en este país”.

Adams dijo que los estadounidenses deben continuar quedándose en casa durante abril y evitar grandes aglomeraciones de personas.