Estados Unidos extiende a los puertos un programa destinado a mejorar la seguridad en la frontera del país con México.
El programa ampliado comenzará a aplicarse en los puertos de la costa del Golfo de México en el sureste de Estados Unidos, así como en los de la costa oeste, casi en la frontera con Canadá, como es el de Seattle y otras áreas.
La vigilancia de la frontera se ha convertido, no sólo en un tema de debate en el Congreso y preocupación del gobierno, sino además, en uno de los asuntos de la campaña electoral legislativa en Estados Unidos.
En función de las demandas por mayor seguridad en los puertos de acceso al país, el gobierno extendió el programa originalmente concebido para reforzar la vigilancia en la frontera con México, mejorando también la seguridad en los puertos marítimos de Estados Unidos que ha sido cuestionada en reiteradas oportunidades.
El director del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por su sigla en inglés), John Morton, hizo el anuncio durante la reunión anual del programa, denominado Grupos de Trabajo de Control y Seguridad Fronteriza (BEST), donde destacó que el programa ha tenido éxito al procesar unos 6.400 casos de tráfico de drogas, armas y personas a lo largo de la frontera.
Originalmente el programa que comenzó hace cinco años se aplicó en la frontera terrestre con México, reforzando la seguridad en el paso de frontera con la ciudad de Laredo en el estado de Texas, se ha expandido a otras 17 localidades fronterizas, manifestó y ahora en su versión ampliada comenzará a aplicarse en los puertos del sureste y noroeste del país.
El programa se basa en una cooperación más amplia entre las agencias de policía federal, así como la Guardia Costera, la Patrulla Fronteriza, el ICE y otras entidades relacionadas a los controles de frontera, aduana e inmigración.