Firmas de Internet contra espionaje de EE.UU.

Larry Page, directivo de Google, dijo que la seguridad de los datos de los usuarios de la web ha sido socavada.

Las más grandes compañías tecnológicas piden al presidente Barack Obama y al Congreso que pongan mayor límite a la vigilancia electrónica en el país.
Las principales firmas tecnológicas de EE.UU. se unieron este martes para protestar contra los programa de espionaje a estadounidenses y demandaron que sean sometidos a mayor supervisión y transparencia.

Los altos ejecutivos de las compañías Google, Microsoft, Yahoo, Facebook, AOL, Linkedln y Twitter suscribieron una declaración y se la enviaron al presidente Barack Obama y a líderes del Congreso en Washington.

El grupo, que ha adoptado como nombre el de Reformar la Vigilancia del Gobierno, pidió cambios que incluyen un acuerdo de parte de las autoridades gubernamentales de que no se recopilará gran volumen de información de las comunicaciones por Internet.

En la página web de la coalición de empresas, Mark Zuckerberg, ejecutivo principal de Facebook, indicó que los programas de vigilancia del gobierno “han demostrado que existe la necesidad real de más divulgación y nuevos límites” a esa recolección de datos.

Larry Page, directivo de Google, dijo que la seguridad de los datos electrónicos de los usuarios de la web ha sido socavada “en secreto y sin supervisión independiente por muchos gobiernos en todo el mundo. Es hora de una reforma y urgimos a EE.UU. a que la encabece”.

La ejecutiva principal de Yahoo, Marissa Mayer, instó al Congreso a “modificar las leyes de vigilancia a fin de asegurar transparencia y responsabilidad para las acciones del gobierno”.

Defensores de los derechos civiles y la privacidad convocaron para este martes un día de protesta nacional llamando y enviando miles de correos electrónicos al Congreso contra las actividades de espionaje de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) de EE.UU.

Los organizadores de la jornada The Day We Fight Back (El día que contraatacamos) rechazan un proyecto de ley impulsado por la presidenta del Comité de Inteligencia del Senado, Dianne Feinstein, que buscaría apuntalar legalmente las operaciones secretas de la NSA.