Desde hace más de una década General Motors sabía de una falla en el encendido de sus autos asociada a 13 muertes y los legisladores quieren saber por qué la firma no actuó antes.
La directora ejecutiva de General Motors (GM), Mary Barra, testificó este martes en el Congreso y dijo que la compañía se encargará de llegar al fondo de la situación y de pedir cuentas a las personas responsables por no haber actuado a pesar de que se conocían las fallas.
Barra testificó en una audiencia en una comisión de la Cámara de Representantes, después de que se supo que GM, desde 2001, sabia de la falla en los interruptores de encendido y decidió no revelar esa información hasta este año. La falla estaría vinculada con 13 muertes.
"Mientras estoy sentada aquí, no puedo decirles por qué tomó tanto tiempo que un defecto de seguridad fuese anunciado (…) Lo que sí les puedo decir es que lo vamos a descubrir. Esta es una situación extraordinaria, incluye vehículos que ya no fabricamos pero salió a la luz bajo mi dirección así que yo soy responsable de resolverla", dijo Barra.
GM sabía
En documentos entregados al gobierno, General Motors indicó que estaba al tanto de las fallas desde 2001, cuando se percataron de problemas en el interruptor de encendido del Saturn Ion.
Ese mismo interruptor fue usado en los modelos Cobalt y otros automóviles, y cuando GM eventualmente se enteró de los accidentes y muertes conectadas con la falla realizó varias revisiones internas, pero a pesar de eso hizo los llamados de revisión apenas este año.
Según una cronología preparada por la comisión de la Cámara de Representantes, ingenieros de GM desarrollaron un arreglo para el interruptor en 2004 pero fue cancelado en 2005, en parte por su costo. Los ingenieros también crearon un nuevo diseño para la llave y así prevenir que se saliera del interruptor, lo que causaba que el motor se parara. Esto fue aprobado y luego cancelado.
GM en problemas
Si alguno de los familiares decide actuar legalmente contra la compañía, esto solo sería parte de una lista de profundos dolores de cabeza que ya están creando una crisis de relaciones públicas a la empresa.
Paralelamente, General Motors está siendo investigada por el Congreso y existe una pesquisa criminal dirigida por el Departamento de Justicia de Estados Unidos.
Familiares culpan a GM
Laura Christian, la madre de Amber Rose, de 16 años, una de las víctimas fatales en 2005 por las fallas del interruptor de encendido, asegura que nunca recibió respuestas de la compañía a sus intentos de contacto. Christian estuvo en la audiencia e hizo declaraciones a los medios.
“Nuestras hijas, hijos, hermanas, hermanos, madres, padres, esposas y esposos, ya no están aquí, porque ellos representaban un costo en la manera de hacer negocios de GM”, dijo Christian.
En otra entrevista, Christian también aseguro que es “una lástima que corporaciones, grandes corporaciones como GM sientan que son los suficientemente grandes para esconder la verdad del público”.
Una investigación sobre la muerte de Amber Rose concluyó que la llave de encendido se salió del interruptor de su Cobalt 2005.
Barra testificó en una audiencia en una comisión de la Cámara de Representantes, después de que se supo que GM, desde 2001, sabia de la falla en los interruptores de encendido y decidió no revelar esa información hasta este año. La falla estaría vinculada con 13 muertes.
"Mientras estoy sentada aquí, no puedo decirles por qué tomó tanto tiempo que un defecto de seguridad fuese anunciado (…) Lo que sí les puedo decir es que lo vamos a descubrir. Esta es una situación extraordinaria, incluye vehículos que ya no fabricamos pero salió a la luz bajo mi dirección así que yo soy responsable de resolverla", dijo Barra.
GM sabía
En documentos entregados al gobierno, General Motors indicó que estaba al tanto de las fallas desde 2001, cuando se percataron de problemas en el interruptor de encendido del Saturn Ion.
Ese mismo interruptor fue usado en los modelos Cobalt y otros automóviles, y cuando GM eventualmente se enteró de los accidentes y muertes conectadas con la falla realizó varias revisiones internas, pero a pesar de eso hizo los llamados de revisión apenas este año.
Según una cronología preparada por la comisión de la Cámara de Representantes, ingenieros de GM desarrollaron un arreglo para el interruptor en 2004 pero fue cancelado en 2005, en parte por su costo. Los ingenieros también crearon un nuevo diseño para la llave y así prevenir que se saliera del interruptor, lo que causaba que el motor se parara. Esto fue aprobado y luego cancelado.
GM en problemas
Si alguno de los familiares decide actuar legalmente contra la compañía, esto solo sería parte de una lista de profundos dolores de cabeza que ya están creando una crisis de relaciones públicas a la empresa.
Paralelamente, General Motors está siendo investigada por el Congreso y existe una pesquisa criminal dirigida por el Departamento de Justicia de Estados Unidos.
Familiares culpan a GM
Laura Christian, la madre de Amber Rose, de 16 años, una de las víctimas fatales en 2005 por las fallas del interruptor de encendido, asegura que nunca recibió respuestas de la compañía a sus intentos de contacto. Christian estuvo en la audiencia e hizo declaraciones a los medios.
“Nuestras hijas, hijos, hermanas, hermanos, madres, padres, esposas y esposos, ya no están aquí, porque ellos representaban un costo en la manera de hacer negocios de GM”, dijo Christian.
En otra entrevista, Christian también aseguro que es “una lástima que corporaciones, grandes corporaciones como GM sientan que son los suficientemente grandes para esconder la verdad del público”.
Una investigación sobre la muerte de Amber Rose concluyó que la llave de encendido se salió del interruptor de su Cobalt 2005.