Combatientes de Estado Islámico atacaron el lunes un aeropuerto militar en la provincia siria de Homs, mientras avanzan en una ofensiva contra bastiones del gobierno al Oeste del país, dijo un grupo Observatorio Sirio para los Derechos Humanos.
Las escaramuzas generadas por Estado Islámico -que es más fuerte en el noreste y este de Siria- en provincias como Homs, Hama e incluso Damasco implican un nuevo desafío para el presidente Bashar al-Assad.
Funcionarios sirios no pudieron ser contactados inmediatamente para realizar comentarios y el ataque no fue reportado en los medios estatales.
La ofensiva se produjo tras tres días de combates surgidos el viernes más hacia el oeste, en la localidad Sheikh Hilal de Hama, dijo el Observatorio. Estado Islámico intentaba cortar la ruta entre Hama y Aleppo, alguna vez la ciudad más poblada de Siria, agregó el grupo.
El jefe del Observatorio, Rami Abdulrahman, indicó que 74 soldados murieron en Hama a manos de Estado Islámico, que habría lanzado los ataques para elevar la moral tras una serie de derrotas frente a fuerzas kurdas en el noreste.
Al mismo tiempo la agencia AP reportó que rebeldes sirios dispararon proyectiles de mortero el lunes, a la hora de mayor tráfico, contra zonas controladas por el gobierno en la norteña ciudad de Alepo, con un saldo de 13 muertos y decenas de heridos, informaron la televisión estatal y un grupo de activistas.
Alepo ha quedado divida en sectores controlados por el gobierno y la oposición desde mediados de 2012. Es común que los rebeldes ataquen las zonas controladas por el gobierno, pero el ataque con morteros del lunes fue uno de los más violentos en varios meses.
También el lunes, aviones del gobierno bombardearon la zona cerca de Jabal al-Zawiya, en la provincia de Idlib, donde un helicóptero del ejército se estrelló el día anterior y sus cinco tripulantes fueron capturados por los rebeldes, informaron activistas. Posteriormente, los rebeldes ultimaron a uno de los tripulantes, según videos colgados en internet.
Esta nota se realizó con el aporte de AP y Reuters.