La Secretaria de Estado de EE.UU. encabezó la ceremonia que entregó varias obras que se constituyen en desarrollo para la deprimida nación y que generarán empleo.
La secretaria de Estado de Estados Unidos, Hillary Clinton, instó en Haití para que los beneficios del desarrollo recaigan sobre quienes realmente lo necesitan al tiempo que inauguró un parque industrial, en un acto que contó con la presencia de su marido, el ex presidente Bill Clinton y el mandatario haitiano Michel Martelly.
"En Estados Unidos estamos orgullosos de las promesas del sueño americano y vimos cómo muchos haitianos han llegado a nuestro país a realizar ese sueño americano. Aquí en Haití, muchos haitianos tienen esa misma dinámica y a lo que nosotros aspiramos es a crear el sueño haitiano", dijo la jefa de la diplomacia estadounidense.
El parque que se entregó empleará a unas 37 mil personas, de ahí que Clinton saludó la llegada de los inversionistas extranjeros.
"Hace tres años, los haitianos sintieron cómo la tierra temblaba, se desplomaban edificios, la gente gritaba de dolor. Hoy el ruido que escuchan es el de las máquinas de coser y los martillos neumáticos. Es esencial que los beneficios resultantes de esos proyectos recaigan en las personas que los necesitan ", dijo Clinton, y agregó que los inversores extranjeros están tomando nota de esa evolución.
Menos de 18 meses después de su llegada al poder, el presidente Martelly debe hacer frente a un movimiento de protesta, en un país que no encuentra la manera de dejar atrás las consecuencias del desastroso sismo de 2010, que causó más de 250.000 muertos.
"En Estados Unidos estamos orgullosos de las promesas del sueño americano y vimos cómo muchos haitianos han llegado a nuestro país a realizar ese sueño americano. Aquí en Haití, muchos haitianos tienen esa misma dinámica y a lo que nosotros aspiramos es a crear el sueño haitiano", dijo la jefa de la diplomacia estadounidense.
El parque que se entregó empleará a unas 37 mil personas, de ahí que Clinton saludó la llegada de los inversionistas extranjeros.
"Hace tres años, los haitianos sintieron cómo la tierra temblaba, se desplomaban edificios, la gente gritaba de dolor. Hoy el ruido que escuchan es el de las máquinas de coser y los martillos neumáticos. Es esencial que los beneficios resultantes de esos proyectos recaigan en las personas que los necesitan ", dijo Clinton, y agregó que los inversores extranjeros están tomando nota de esa evolución.
Menos de 18 meses después de su llegada al poder, el presidente Martelly debe hacer frente a un movimiento de protesta, en un país que no encuentra la manera de dejar atrás las consecuencias del desastroso sismo de 2010, que causó más de 250.000 muertos.