Clinton defiende los derechos de la mujer

En la Conferencia de Desarrollo Sostenible de Rio+20, la secretaria de Estado de EE.UU, Hillary Clinton, invitó a “pensar diferente” al tomar medidas para generar un crecimiento económico sostenido.

La secretaria de Estado de EE.UU. lamentó que en la Cumbre de Rio+20 no se defiendan las libertades reproductivas de la mujer.
La secretaria de Estado de EE.UU., Hillary Clinton, manifestó su desacuerdo con que el texto final de la Cumbre Rio+20, no haya incluido una moción en cuanto a los derechos reproductivos de las mujeres.

"Si bien estoy muy satisfecha de que el documento apoye la salud sexual y reproductiva y el acceso universal a la planificación familiar, para alcanzar nuestras metas sobre desarrollo sostenible también tenemos que garantizar los derechos reproductivos de las mujeres", dijo Clinton.

La jefa de la diplomacia estadounidense afirmó que las mujeres deben tener garantías para decidir si quieren tener hijos o no, en qué momento, con quién y cuántos, en lugar de permitir leyes discriminatorias o violentas argumentando control prenatal y permitiendo el aborto.

"Se debe dar a las mujeres el poder de tomar decisiones sobre si quieren tener hijos, y cuántos", sostuvo. "Estados Unidos seguirá trabajando para garantizar que esos derechos sean respetados en acuerdos internacionales".

Por su parte, la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff y la expresidenta irlandesa Mary Robinson, se sumaron a la defensa de los derechos reproductivos femeninos y criticaron la oposición y presiones del Vaticano frente al tema.

"¿Qué saben hombres solteros sobre la vida, la salud, y las decisiones de mujeres pobres?”, cuestionó Robinson en una entrevista al diario O Globo.

Aunque el primer borrador del texto final sí incluía una moción en defensa de estos derechos, la versión final aprobada por todas las delegaciones no mostró ese aparte.

Adicionalmente, la secretaria Clinton instó a la comunidad internacional a ser inclusiva en los esfuerzos para lograr sociedades prósperas y sostenibles, reconociendo las necesidades de los trabajadores en las economías informales, desarrollando el talento y la energía de los jóvenes, y respondiendo a la abrumadora evidencia presentada por el Banco Mundial que las mujeres son el motor esencial del desarrollo sostenible.