Partido de Macron enfrenta reto en elección en el Senado

El presidente francés Emmanuel Macron observa a unos niños jugar durante una visita a un centro de cuidado infantil en Longjumeau, sur de París, el miércoles 23 de septiembre de 2020.

Creado hace cuatro años, el partido oficialista República en Movimiento tiene 23 escaños en el Senado y llega a las elecciones con baja popularidad, y afectado por la gestión de Macron en la crisis del coronavirus y por la recesión resultante.

Casi la mitad de los escaños del Senado de Francia están en juego el domingo en unas elecciones que probablemente dejarán la cámara dominada por conservadores y supondrán un nuevo golpe electoral para el partido centrista del presidente Emmanuel Macron.

La elección es indirecta, con senadores elegidos principalmente por unos 75.000 funcionarios electos locales, como concejales de la ciudad. Se votará por 172 de los 348 escaños en el Senado, cuyos senadores cumplen mandatos de seis años.

Se espera que el conservador Partido Republicano mantenga su mayoría, ahora en 143 escaños.

El partido República en Movimiento de Macron se creó hace apenas cuatro años y tiene 23 escaños en el Senado saliente. Ha perdido popularidad desde las últimas elecciones en 2017 debido a las protestas de los chalecos amarillos contra las políticas que se considera que favorecen a los ricos, las luchas internas del partido y el desencanto de los votantes con el liderazgo de Macron, incluida su gestión de la crisis del coronavirus.

Los Verdes, por su parte, gozaron de un impulso en las elecciones municipales de este año gracias a la creciente preocupación pública por el cambio climático. Espera que la elección del domingo le dé suficientes senadores para formar un grupo de votación oficial en la cámara alta. El partido tiene actualmente solo cuatro senadores y necesita 10 para formar un grupo.

Las elecciones al Senado se celebran cada tres años, y parte de la cámara se reemplaza cada vez.

El partido de Macron ha tenido problemas en las últimas elecciones, y el presidente no ha anunciado si buscará un segundo mandato en 2022. La pandemia del coronavirus y la recesión resultante, junto con años de protestas, han puesto en peligro sus grandes planes de transformar la economía de Francia para que sea más global, competitiva y para reinventar la unidad europea.

El coronavirus en Francia ha matado a más de 31.600 personas, una de las cifras más altas de Europa.