El presidente Barack Obama firmó una orden ejecutiva que renueva un programa con el propósito de elevar la excelencia académica de los estudiantes hispanos en Estados Unidos.
Uno de los principales objetivos de la llamada Iniciativa de la Casa Blanca sobre la Excelencia Educativa para los Hispanos es garantizar que los programas federales atiendan las necesidades de los alumnos de esa comunidad.
Hoy en día--dijo Obama--, los hispanos constituyen la minoría más numerosa en las escuelas del país, más de uno de cada cinco estudiantes, y los retos que encaran son de proporciones monumentales.
La meta del presidente es que para el año 2020 la nación ostente otra vez la tasa más alta en el mundo de graduados universitarios.
Obama defiende la idea de que elevar el nivel académico de los estudiantes ayudará a Estados Unidos a competir en una economía cada vez más global.
El decreto establece la creación de un grupo de trabajo intergubernamental y un comité asesor presidencial a fin de mejorar el desempeño escolar de los niños y jóvenes hispanos en todo el país.
Según el secretario de Educación, Arne Duncan, sólo el 75 por ciento de los estudiantes estadounidenses se gradúan de secundaria, pero esa proporción se reduce al 50 por ciento entre los hispanos.
Expertos docentes, líderes comunitarios y funcionarios gubernamentales relacionados con el sector sostuvieron una reunion cumbre en Washington para analizar cómo mejorar el acceso de los hispanos a la educación superior.
La iniciativa de la Casa Blanca en busca de la excelencia académica entre los hispanos fue creada en 1990 con el propósito de asesorar sobre el tema al secretario de Educación.
La firma del decreto ocurre a menos de dos semanas de las elecciones del 2 de noviembre próximo, en las que los demócratas temen perder el respaldo del voto hispano entre otros factores debido al persistente desempleo y la ausencia de una reforma migratoria.