Los esfuerzos diplomáticos para poner fin al significativo aumento de la violencia en Siria llegan este miércoles al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas donde autoridades alemanas y francesas se reunieron con un líder de la oposición siria y el enviado de la ONU para Siria, Staffan de Mistura.
Casi 280 civiles han sido muertos en la norteña ciudad de Alepo desde el 22 de abril, por lo menos 19 tras un ataque con un proyectil a un hospital el martes, lo que generó una fuerte respuesta del secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry.
“Los equipos estadounidenses y rusos están trabajando para establecer un mecanismo de tregua más sustentable para que las conversaciones sobre el futuro de Siria puedan reanudarse”, dijo Kerry.
El secretario Kerry reiteró el martes su punto de vista de que el presidente sirio, Bashar al-Assad, no tiene futuro político advirtiendo que la lucha continuará mientras él permanezca en el poder.
Agregó que él y el ministro de Relaciones Exteriores ruso, Sergei Lavrov, han pedido una transición política para el 1 de agosto.