Combatientes en Yemen están supuestos a deponer temporalmente sus armas este martes por la noche y comenzar a cumplir un cese el fuego de cinco días para permitir que llegue la ayuda humanitaria que los civiles necesitan desesperadamente.
Los rebeldes hutíes, las fuerzas del gobierno y la coalición liderada por Arabia Saudita han prometido cumplir la tregua, aunque el lunes continuaron los fuertes combates y no había garantía que se detuvieran a tiempo.
La jefa humanitaria de la ONU, Valerie Amos, pidió a todas las partes detener la violencia y permitir que los voluntarios entreguen alimentos, atiendan a los heridos y a los enfermos,dar acceso al agua potable y dejar que la gente pueda escapar a otras áreas más seguras.
“Dada la deteriorada situación humanitaria en Yemen, con cientos de miles de civiles vulnerables atrapados en medio de los combates y sin poder acceder a la ayuda que les pueda salvar la vida, es esencial que esta pausa se materialice”, dijo Amos en un comunicado.
De acuerdo a Naciones Unidas, los combates en Yemen han dejado ya más de 1.400 muertos.