Tras varios meses luchando contra el cáncer de hígado, Robin Gibb, integrante de la legendaria banda The Bee Gees se encuentra en estado de coma.
Según ha comunicado un amigo de la familia al periódico inglés The Sun, Gibb se encuentra en un hospital privado de Chelsea, en Londres, donde familiares se encuentran visitándole.
Gibb ha desarrollado neumonía, lo cual unido a su cáncer ha desencadenado que su estado se agrave hasta tal punto que, según la misma fuente, los médicos han anunciado a los familiares que a Gibb sólo podrían quedarle unos días de vida.
Los hermanos Gibb -Robin, Barry y Maurice- formaron la banda The Bee Gees en los años 60 y durante esa década y la siguiente se convirtieron en una de las bandas legendarias.
Sin embargo, después de más de 40 años actuando juntos, la banda, sufrió un revés en el año 2003, tras el fallecimiento de uno de los hermanos Gibb. No obstante, en 2009, Robin y Barry volvieron a los escenarios bajo el nombre de los Bee Gees.
En 2011, a Robin le diagnosticaron cáncer de hígado y aunque en algún momento se pensó que podría estar curado, ahora los médicos piensan que podría tener un segundo tumor.
Sus problemas de salud se iniciaron en octubre 2010 después que fue intervenido de urgencia por un bloqueo en el intestino. Se le diagnosticó un cáncer de colon e hígado.
El músico canceló el pasado martes su asistencia en Londres al estreno de "Titanic Requiem", un álbum basado en el hundimiento del Titanic que compuso junto con su hijo RJ Gibb, según la agencia de información Efe.
Robin Gibb ya había cancelado todos sus actos públicos anteriores al lanzamiento del álbum debido a la operación intestinal que se le practicó el pasado 25 de marzo.
“A veces me pregunto si todas las tragedias que mi familia ha sufrido, como la muerte de Andy y Maurice, así tan jóvenes, y todo aquello que me ha sucedido recientemente, sea una suerte de karma que estamos pagando por toda la fama y fortuna que habíamos llegado a tener”, declaró recientemente Gibb a The Sun.
Según ha comunicado un amigo de la familia al periódico inglés The Sun, Gibb se encuentra en un hospital privado de Chelsea, en Londres, donde familiares se encuentran visitándole.
“A veces me pregunto si todas las tragedias que mi familia ha sufrido, como la muerte de Andy y Maurice, así tan jóvenes, y todo aquello que me ha sucedido recientemente, sea una suerte de karma que estamos pagando por toda la fama y fortuna que habíamos llegado a tener”Afirmó Gibb en una entrevista al diario inglés "The Sun"
Gibb ha desarrollado neumonía, lo cual unido a su cáncer ha desencadenado que su estado se agrave hasta tal punto que, según la misma fuente, los médicos han anunciado a los familiares que a Gibb sólo podrían quedarle unos días de vida.
Los hermanos Gibb -Robin, Barry y Maurice- formaron la banda The Bee Gees en los años 60 y durante esa década y la siguiente se convirtieron en una de las bandas legendarias.
Sin embargo, después de más de 40 años actuando juntos, la banda, sufrió un revés en el año 2003, tras el fallecimiento de uno de los hermanos Gibb. No obstante, en 2009, Robin y Barry volvieron a los escenarios bajo el nombre de los Bee Gees.
En 2011, a Robin le diagnosticaron cáncer de hígado y aunque en algún momento se pensó que podría estar curado, ahora los médicos piensan que podría tener un segundo tumor.
Sus problemas de salud se iniciaron en octubre 2010 después que fue intervenido de urgencia por un bloqueo en el intestino. Se le diagnosticó un cáncer de colon e hígado.
El músico canceló el pasado martes su asistencia en Londres al estreno de "Titanic Requiem", un álbum basado en el hundimiento del Titanic que compuso junto con su hijo RJ Gibb, según la agencia de información Efe.
Robin Gibb ya había cancelado todos sus actos públicos anteriores al lanzamiento del álbum debido a la operación intestinal que se le practicó el pasado 25 de marzo.
“A veces me pregunto si todas las tragedias que mi familia ha sufrido, como la muerte de Andy y Maurice, así tan jóvenes, y todo aquello que me ha sucedido recientemente, sea una suerte de karma que estamos pagando por toda la fama y fortuna que habíamos llegado a tener”, declaró recientemente Gibb a The Sun.