China condenó una medida del gobierno de Estados Unidos, de imponer nuevas sanciones económicas a nueve empresas chinas o individuos, por supuestamente vender tecnología armamentista a Irán.
Una declaración emitida hoy por el Ministerio de Relaciones Exteriores de China, calificó las sanciones como no razonables, y afirmó que a Beijing no le complace la medida.
El documento también reiteró la oposición de China de transferir armas de destrucción masiva.
Funcionarios estadounidenses se rehusaron a identificar a las empresas chinas o individuos que han sido sancionados.
Las ventas de armas llevadas a cabo por empresas chinas, según se informó, tuvieron lugar entre septiembre del 2000 y octubre del 2001.