Las autoridades niponas esperan asegurar el rápido retorno de los cuatro japoneses sobrevivientes secuestrados por Corea del Norte durante los años 70 y 80.
Tokio quiere que las víctimas de secuestro sean repatriadas antes de las conversaciones que tendrán lugar en octubre respecto al establecimiento de relaciones diplomáticas.
Ayer, el presidente norcoreano Kim Jong Il admitió por primera vez que agentes de su país secuestraron a once ciudadanos japoneses. Así lo expresó durante una histórica cumbre en Pyongyang con el Primer Ministro nipón Junichiro Koizumi.
Kim ofreció disculpas por los secuestros y dijo que a los cuatro japoneses que siguen vivos se les podría permitir regresar a su país.