Han aumentado las amenazas de nuevos actos de violencia entre Israel y el grupo extremista palestino Hamas, mientras ambas partes han declarado que ninguno está seguro, y que esperan un rápido mejoramiento en el débil plan de paz internacional.
Las autoridades y la prensa israelí dijeron este viernes que el primer ministro israelí Ariel Sharon ordenó que el Ejército aniquile a Hamas, porque no cree que el primer ministro palestino Mahmoud Abbas pueda controlar a los extremistas.
Integrantes de Hamas han reaccionado con ira a un ataque el jueves que mató a un influyente miembro y a su familia.
El grupo ha prometido venganza, indicando que cada isarelí se ha transformado en un objetivo y adviritió a los extranjeros que salgan de Israel.