El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas, Kofi Annán, rindió tributo a los empleados de la organización mundial muertos en el atentado de Bagdad ocurrido el martes, y dijo que este hecho ha dejado perplejos a sus colegas.
En declaraciones emitidas en Nueva York dirigidas a colegas de la ONU, Annán dijo que normalmente la organización mundial participa en las tragedias de los demás, pero que ahora enfrenta su propia tragedia.
Y dijo textualmente “el dolor en nuestras almas es demasiado para soportarlo”.
El discurso televisado, el secretario general permitió un vistazo poco común a la labor interna de las Naciones Unidas que incluyó un minuto de silencio para los empleados fallecidos.
Annán destacó que el personal de la ONU se ha reunido con anterioridad para rendir tributo a otros colegas muertos, pero destacó que el ataque del martes ocurrido en Bagdad fue más deliberado y despiadado que cualquier otro.
Annán sugirió que la menor manera de rendir tributo a quienes murieron es continuar con su trabajo, y ayudar al pueblo de Irak a recuperar su soberanía.